sábado, 14 de diciembre de 2013

CASCADA DEL TABAYÓN DEL MONGALLU

 En diciembre decidimos buscar una ruta sencilla y corta pensando en terminarla para el mediodía y celebrar las próximas fiestas con una comida en algún restaurante de la zona. La senda a la cascada del Tabayón del Mongayu era idónea, con el aliciente de completar una ruta que en su día, hace unos tres años, parte del grupo se tuvo que volver sin llegar a ella por un accidente con unas botas que se lanzaron a la deriva por el Río Mongallu.
 Un mapa de la ruta:

Y su track:


 La convocatoria tuvo poco seguimiento; en esta ocasión sólo éramos cuatro.

 En lugar de realizar la ruta según indica el panel que está en el pueblo de Tarna (P.R. AS-60) decidimos caminarla a la inversa buscando el vallín del río Mongallu, para ello caminamos unos cientos de metros por la carretera del puerto para buscar su salida. Por detrás de nuestra marcha va quedando Tarna.

 Encontramos el camino, ancho y bien señalizado, que se interna en un bosque mixto en la parte baja del recorrido.

 En el suelo queda una muestra de las hojas del bosque con el toque blanquecino de la última helada.

 El camino no presenta ninguna dificultad y asciende suavemente por el bosque que recubre uno de los flancos del valle.

 En una de sus vueltas vemos al fondo el Cantu´l Oso, cumbre que hollamos el mes pasado.

 Paso a paso llegamos a la majada La Campona desde donde vemos por primera vez la cascada.

 Buscamos la manera de aproximarnos a la cascada para lo que nos dirijimos al río y tras dar unas vueltas a un lado y otro del cauce confundidos por las muchas sendas que recorren sus orillas.

 Tenemos la cascada enfrente de nosotros.

 Y nos acercamos a ella.

 Nuestro cuarto brindis en la montaña por la Navidad y Año Nuevo, cortesía de Ayo.

 Sin entretenernos mucho empezamos el regreso para no perdernos la comida en Pendones o Bezanes, ya veremos...
 Para el descenso buscamos la marcada como ruta de subida a la cascada. En alguna zona tenemos que  salirnos de la senda y echarnos al piornal para evitar unas placas de hielo que la cubrían.

 Llegamos a la parte alta de la majada La Campona para coger la senda que nos lleva de vuelta a Tarna.

 Superada la majada entramos entre las hayas del Monte Saperu.

 A medida que bajamos el bosque se vuelve menos denso y el camino más ancho y abierto.

 Pasamos por el puentín que salva el arroyo de La Requexada.

 Por la parte baja del bosque ya muy cerca de Tarna.

 Y la comida deseada en Bezanes.


sábado, 16 de noviembre de 2013

ASCENSIÓN AL CANTU´L OSO

 Para esta ruta nos citamos en Bezanes, en el concejo de Caso. Nuesta intención es subir en un taxi todoterreno hasta Brañagallones y desde allí una ruta que nos lleve a la Peña del Viento y al Lago Ubales. Pero el mal tiempo nos hizo cambiar de planes, el todoterreno sólo nos subió unos 4 km por la pista a la braña antes de dejarnos en la nieve para hacer el resto del camino a pie, lo que nos llevó al Cantu del Oso para no castigarnos demasiado pues también habría que hacer a pie todo el descenso desde Brañagallones a Bezanes. El mapa y track de la ruta:


 Tras los 4 km motorizados nos ponemos en marcha.

 Con mucha nieve desde el principio, caminamos por la pista. La borrasca había descargado la noche anterior y la mañana tenía la calma que sucede al temporal, no se movía una hoja y el silencio era casi absoluto, sólo el tamborileo de la nieve que de vez en cuando caía de los árboles. Ante nosotros el bosque Redes cubierto por la nevada.
                                               

 Las hayas dobladas por el peso de la nieve acumulada.

 Reponemos fuerzas en un mirador de la pista. Enfrente tenemos el bosque Redes y por la izquierda la Sierra de Príes, en uno de los flancos de Brañagallones.

 Estamos terminando la pista, a lo lejos se ven las primeras cabañas de Brañagallones.

 Después de unos 6 Km llegamos a la Braña.

 Allí nos replanteamos la ruta. La Peña´l Vientu y el Ubales nos quedan demasiado lejos para luego tener que bajar toda la pista a pie por lo que decidimos acercarnos al Cantu´l Oso, mucho más cerca y de menor altura. Buscamos la ruta en dirección SE en la braña.

 En la majada la nieve nos llegaba por encima del tobillo, pero fina y seca era muy fácil de pisar. Una auténtica gozada.  

 Desde las primeras rampas hacia el Cantu´l Oso; la braña va quedando atrás.

 Por delante, paso a paso, más y más nieve. Aunque la subida se hace durilla, pisar esa nieve fina y seca en un entorno como este es todo un placer.

 Vamos saliendo de la zona de bosque y aunque no hay mucha visibilidad a cada paso vamos viendo el ascenso con más claridad.

 En la parte más pindia del ascenso, buscando la cresta donde debería estar la cima del Cantu´l Oso.

 En algunos momentos encontramos muchísima nieve; el esfuerzo lo ponían los que abrían huella.

 Por fin llegamos a la cresta. Aunque con un poco de niebla, el paisaje al otro lado de la montaña es espectacular.

 Vamos llegando los rezagados.

 Llegamos a la cumbre. Como las condiciones no son las ideales para entretenerse, dejamos la comida para más tarde en algún lugar más abrigado.

 Decidimos buscar una alternativa al descenso para no volver sobre nuestros pasos y nos dirijimos un poco más al N para encontrar el hayedo que cubre las faldas del cresterío y que nos debería llevar a la pista que llega a Brañagallones pero sin necesidad de volver a pasar por la braña.

  Entramos en el hayedo.

 A la belleza propia de los hayedos se le sumaba la que le daba la primera nevada de la estación, Personalmete era la primera vez que estaba en un bosque como este en estas condiciones y el espectáculo me impresionó. Las hayas todavía conservaban hoja y hayucos y estaban cargadas de nieve, la quietud era casi absoluta, sólo de vez en cuando el ruido de algún paquete de nieve que caía de sus ramas.

 El descenso no tenía ninguna dificultad, sólo la de pelear con tanta nieve caída y tener que bajar por algún tobogán.

  El hayedo nos deja en la pista en dirección a Bezanes.

 Pasamos de vuelta por el túnel del Crestón...

 ...y por la Fuente El Andorvio.

 Desde aquí sólo falta completar la pista hasta Bezanes cada vez con menos nieve. En total una ruta de 20 km con una ascensión y una de las nevadas más bonitas que habíamos visto hasta la fecha, las previsiones eran de mal tiempo y el día no pudo salir mejor. Para mí, una ruta inolvidable...